De la 1era edición. Sacando pulóveres del otro invierno me doy cuenta que hay más de uno agujereado, y que uno precioooooso que tenía, italiano, finíiisimo (ja), tiene no uno, como pensé al principio, ni dos, como descubrí al rato, ni 3, como ví más tarde, sino 4, CUATRO inmundos agujeros polillescos.
Por mí, que se hagan italianos y coman tallarines. Pero que no arruinen mi ropa :(
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