Anoche cené livianito. Cuando me estaba por dormir (un par de horas largas después) ya tenía hambre de nuevo. O la panza vacía, que no es lo mismo pero molesta igual.
Esta mañana, por supuesto, me levanté con hambre. Desayuné y me fui a la pileta.
Cuando volví, y después del incidente con la araña, me dio hambre de vuelta. Hice un segundo desayuno, alla hobbit.
Almorcé temprano, comí algunas porquerías a la tarde, pero a la vuelta de la decepcionante visita al consultorio psicológico (no tan decepcionante porque no tenía muchas ganas de ir la verdad verdadera), me agarró hambre de vuelta.
I'm hungry.
Y lo peor es que ni sé qué quiero.
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1 comment:
This chickatrice corpse tastes terrible!
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